Compañerismo en carrera

Parece que es incompatible el compañerismo y la competición. En cierto modo es cierto, salvo cuando los objetivos de los competidores no son incompatibles con ayudar a un "oponente".
Por ejemplo, Iván Fernández Anaya, durante el cross de Burlada (Navarra), en diciembre de 2012, "se negó a ganar (...), quien, cuando iba segundo, bastante distanciado del primero, en la última recta de la carrera, observó cómo el seguro ganador, el keniano Abel Mutai (un muy buen atleta: medallista de bronce en los 3.000 metros obstáculos de los Juegos de Londres) se equivocaba de línea de meta y se paraba una decena de metros antes de la pancarta" (Arribas, 2012, 14 diciembre, p. 62).

Foto: Calleja (Diario de Navarra) 

Existen otros ejemplos, como las competiciones de escalada deportiva, en las que los competidores comentan la vía y sus posibles soluciones durate el tiempo de visualización previa. Ya tendrás tiempo de demostrar después en la pared quién es el mejor escalador.

Foto: Germán García (2012, 17 de diciembre) www.campusescalada.com.ar

El pasado 27 de julio, durante el maratón Real Sitio Trail, el K22 y el Mini Trail de La Granja (Segovia), pudimos ver diferente ejemplos de compañersimo, entre los que destacan numerosas llegadas a meta de la mano, como la de los primeros del maratón (Luisete y Chinotto) (Caselles, 2014, 30 de julio), el tercer puesto de Mini Trail Femenino (Gemma y Mayte) o de dos de los corredores de la categoría cadete.

 Foto: G,M, La Acebeda, en www.vamosacorrer.com

Después de tanto esfuerzo, la victoria pasa a un segundo plano cuando el compañerismo es el protagonista en un deporte cuyo objetivo está en el disfrute de la propia prueba deportiva y su entorno natural.

Sin duda, un ejemplo a seguir para los corremontes.